¿Qué son los músculos abdominales?
Los músculos abdominales son los que se encuentran en la parte delantera del torso (también llamada tronco), entre las costillas y la pelvis. Los músculos abdominales, tanto en las personas embarazadas como en las no embarazadas, están diseñados para sostener el torso. Esto permite el movimiento, como caminar y agacharse. La fuerza de los músculos abdominales mantiene los órganos internos en su sitio.
Hay 4 tipos de músculos abdominales – los oblicuos externos e internos, y los transversos y rectos abdominales – que vienen en pares (uno a cada lado del torso), y trabajan juntos para:
- Estabilizar el torso y mantener los órganos en su sitio
- Soportar los movimientos entre la caja torácica y la pelvis
- Permitir que el torso se retuerza
El término «músculos centrales» se utiliza habitualmente para describir los músculos abdominales más profundos y los músculos de la espalda, que se unen a la columna vertebral o a la pelvis. Los músculos centrales se encargan de mantener el cuerpo estable y equilibrado y de proteger la columna vertebral.
¿Qué ocurre con los músculos abdominales durante el embarazo y el parto?
Durante el embarazo, el bebé en crecimiento estira los músculos abdominales. El abdomen de la madre cambia de forma durante el embarazo debido al crecimiento y al movimiento del bebé, por lo que sus músculos abdominales también se ven afectados. Por ejemplo, los músculos abdominales se estiran progresivamente a medida que avanza el embarazo, ya que el útero se expande.
Durante el parto, la mayor parte de los empujes los realiza el útero, no los músculos abdominales. Después del parto, los músculos abdominales se sentirán débiles y estirados, pero estos músculos deberían volver a tonificarse con el tiempo.
¿Cómo se pueden fortalecer los músculos abdominales durante el embarazo?
Los músculos abdominales se estiran en exceso durante el embarazo ya que el bebé se apoya en ellos, por lo que es importante que se ejerciten. Fortalecer los abdominales puede ayudar a las mujeres embarazadas a mantenerse activas y a utilizar los músculos abdominales para las actividades cotidianas, como el apoyo y el movimiento. Ejercitar los músculos abdominales durante el embarazo también ayuda a que recuperen su longitud y forma originales después del nacimiento del bebé.
Consejo de seguridad: No se recomienda hacer abdominales ni sentadillas durante el embarazo. Esto se debe a que los músculos abdominales estirados de una mujer embarazada no funcionan de la misma manera que cuando no está embarazada. Estos ejercicios suelen realizarse tumbada sobre la espalda. Esta posición puede provocar mareos en las mujeres embarazadas, ya que el peso del bebé descansa sobre los principales vasos sanguíneos.
Una forma segura de trabajar los músculos abdominales y mejorar la fuerza del tronco es meter los músculos sin mover la columna vertebral, como si se succionara el ombligo hacia dentro, hacia la columna vertebral.
Las clases de ejercicios específicos para embarazadas también pueden ayudar a desarrollar y mantener la fuerza del tronco, como las clases de yoga y Pilates para embarazadas. Suelen centrarse en ejercicios de bajo impacto y presentan movimientos que ayudan a fortalecer el núcleo, la respiración y la relajación, fortaleciendo los músculos abdominales, el suelo pélvico y aliviando el dolor lumbar.
¿Qué problemas pueden sufrir los músculos abdominales durante el embarazo?
El aumento del tamaño del útero hace que los músculos abdominales se estiren. Puede hacer que las dos bandas de músculos que se unen en el centro del abdomen se separen. Esta situación se denomina «diástasis de rectos». Esta separación muscular puede aparecer a veces como una protuberancia en el centro del abdomen. Esta afección puede causar dolor en la parte baja de la espalda o dificultar el levantamiento de objetos o la realización de otras actividades físicas. La separación del músculo abdominal suele tratarse después del parto con ejercicio y fisioterapia. Ocasionalmente es necesaria la cirugía.
Si cree que puede tener diástasis de rectos, acuda a su médico o al servicio de salud materna.