Informe de caso
Presentamos el caso de un hombre de 73 años. Entre sus antecedentes destaca la ausencia de alergias a medicamentos. Como factores de riesgo cardiovascular tenía hipertensión, diabetes mellitus, dislipidemia y enfermedad coronaria revascularizada con triple bypass. Tenía un marcapasos. Acudió a nuestro servicio trasladado por su médico de cabecera debido a una historia de 5 años de dolor lumbar mecánico, que en los 4 meses anteriores había llegado a tener un ritmo mixto que le impedía dormir por la noche. Era resistente al tratamiento estándar con analgésicos del primer y segundo escalón de la escalera del dolor de la Organización Mundial de la Salud y antiinflamatorios no esteroideos.
En la exploración física de su columna vertebral se observaba una mínima escoliosis, presión negativa en la columna lumbar, limitación en la flexión y extensión en los últimos estadios, sin otras anomalías, y una exploración neurológica normal. La radiología simple reveló una escoliosis lumbar, una lisis menor del 20% de L5 sobre S1, con enfermedad discal, fenómeno de vacío y esclerosis posterior sugestiva de artrosis. La aorta abdominal estaba calcificada, con una considerable dilatación causada por un aneurisma de aproximadamente 10 cm de diámetro (Fig. 1).
Radiografías anteroposteriores y laterales de la columna lumbar. Muestran dilatación aneurismática de la aorta abdominal rotulada con una línea que mide su eje transversal.
Dado este hallazgo, la paciente fue intervenida quirúrgicamente de forma vascular en las siguientes 48h, con desaparición del dolor lumbar mixto. Se habían realizado pruebas de laboratorio urgentes antes de la operación. La hemoglobina era de 10,3g/dL, con volumen corpuscular medio y hemoglobina corpuscular media normales; las plaquetas y los estudios de coagulación eran normales. No se encontró nada anormal en la función hepática. La creatinina sérica era de 1,3 mg/dL.
Realizamos una tomografía computarizada de la columna lumbosacra, que mostró espondilolisis bilateral en L5 con anterolistesis de grado 1 de L5 sobre S1. El resto de los cuerpos vertebrales tenían una alineación, altura y morfología conservadas. El diagnóstico fue osteoartritis interapofisaria L5-S1 con enfermedad discal degenerativa. Se observó fusión intercorporal, fenómeno de vacío y esclerosis subcondral en las placas terminales. Pequeña protuberancia posterolateral izquierda que estaba en contacto con el saco tibial. El paciente fue sometido a una reparación aortoilíaca secundaria al tratamiento de un aneurisma abdominal.
Discusión
La aorta abdominal es el lugar más común de los aneurismas arteriales. Los aneurismas pueden ser asintomáticos. Cuando se detectan síntomas, el abordaje clínico depende de la localización. Los factores de riesgo de rotura son el consumo de tabaco, la hipertensión, el gran tamaño y la presencia de síntomas.1
La indicación de tratamiento quirúrgico en este paciente fue el gran tamaño del aneurisma y los demás factores de riesgo, que implicaban un alto riesgo de rotura.2
Como conclusión, no debemos pasar por alto las causas de dolor lumbar que son externas a la columna vertebral. El dolor lumbar puede implicar una enfermedad subyacente grave, y el tratamiento precoz puede mejorar el pronóstico.
Divulgaciones éticasProtección de los sujetos humanos y animales
Los autores declaran que no se han realizado experimentos en seres humanos ni en animales para este estudio.
Confidencialidad de los datos
Los autores declaran que han seguido los protocolos de su centro de trabajo sobre la publicación de datos de pacientes.
Derecho a la intimidad y consentimiento informado
Los autores declaran que en este artículo no aparecen datos de pacientes.
Conflictos de intereses
Los autores declaran que no tienen conflictos de intereses.