Visite cinco lugares emblemáticos de Alemania
¿Piensa viajar a Alemania? Asegúrese de que su itinerario incluya visitas a algunos de los lugares históricos imprescindibles de Alemania. Aunque no sea posible incluir todos los sitios hermosos del país, hay algunos lugares notables que no querrá perderse. A continuación, nuestras cinco selecciones de lugares históricos alemanes para visitar durante su estancia en el país.
La Selva Negra
La Selva Negra es un lugar tan encantador y pintoresco como parece. Para los ávidos excursionistas, esta zona que se encuentra en la región suroeste de Alemania es un paraíso. Con más de 160 kilómetros de bosque para explorar, la Selva Negra alberga altísimas cascadas, exuberantes valles verdes e impresionantes cimas de montañas. Para los viajeros menos aficionados al senderismo, la Selva Negra puede recorrerse en tren a través del Ferrocarril de la Selva Negra o en coche por la Ruta Panorámica de la Selva Negra, de 70 kilómetros.
El Muro de Berlín
Aunque puede que no sea tan impresionante como un castillo del siglo IX, el Muro de Berlín, construido en 1961, es uno de los lugares históricos más significativos y trágicos de Alemania. Lo que en su día fue un muro sólido y elevado de 155 kilómetros, ahora sólo son secciones del mismo cubiertas de grafitis. Estar frente a los restos es un crudo y desgarrador recordatorio de las muchas vidas que se perdieron cuando más de 70 personas intentaron escapar del Este durante la Guerra Fría. Después de visitar el muro, pase por la cercana Exposición del Muro de Berlín y por el Monumento al Muro de Berlín.
La Isla de las Flores del Lago de Constanza
Insel Mainau, una isla en medio del Lago de Constanza, consta de más de 110 acres de hermosa vegetación y parterres de flores de vivos colores. Destino romántico para hacer un picnic o disfrutar del paisaje del lago circundante, se puede acceder a la «isla de las flores» a través de un puente peatonal o en barco. Presuponga varias horas para explorar esta encantadora isla y su castillo del siglo XVIII, Schloss Mainau. Este majestuoso centro cuenta con estructuras históricas como el Salón Blanco, una casa de la puerta y una torre defensiva. Después de recorrer los terrenos, disfrute de una copa de vino o de una tranquila cena en uno de los restaurantes situados a las afueras del castillo.
Rothenburg ob der Tauber
Aunque no es un lugar histórico como el Muro de Berlín o la Selva Negra, la ciudad de Rothenburg ob der Tauber está cargada de historia. La belleza arquitectónica de esta ciudad del siglo XVII está prácticamente intacta, lo que permite a los visitantes sentirse como si hubieran retrocedido en el tiempo mientras pasean por sus calles. Los lugareños recomiendan caminar hasta la Torre del Ayuntamiento, desde donde se obtienen vistas panorámicas de la ciudad una vez que se llega a la cima. Otro lugar que hay que visitar es el apacible río Tauber, que se encuentra justo fuera de las murallas de la ciudad.
Parque y Palacio de Sanssouci
Si se encuentra en Potsdam, pase una tarde en el Parque y Palacio de Sanssouci, un magnífico lugar que se compara habitualmente con palacios reales como el de Versalles en Francia. Construido alrededor de 1745, el palacio se construyó con el propósito de proporcionar a Federico el Grande un escape de sus problemas. Esto explica el nombre del lugar. Sanssouci, traducido al español, significa «sin preocupaciones». A lo largo del parque, encontrará hermosos jardines de flores, miles de árboles frutales y varios invernaderos. Después de recorrer la larga y sinuosa escalera, llegará al Palacio Sanssouci, una magnífica estructura que se distingue por sus paredes amarillas y su cúpula de cobre.