Si estás embarazada, es muy posible que experimentes calambres o punzadas en el estómago en algún momento. Al fin y al cabo, están pasando muchas cosas ahí abajo en este momento.
El dolor abdominal durante el embarazo puede provocar naturalmente ansiedad, pero intenta relajarte: si no estás experimentando ningún otro síntoma, este tipo de dolor no suele ser motivo de preocupación.
Lesley Gilchrist, matrona titulada y cofundadora de My Expert Midwife, explica cuáles son las causas más comunes de dolor y secreción abdominal durante el embarazo, y cuándo puede ser una buena idea buscar apoyo profesional.
- ¿Es normal el dolor abdominal en el embarazo?
- Cómo aliviar el dolor abdominal durante el embarazo
- Cuándo consultar por el dolor abdominal en el embarazo
- En el primer trimestre
- En el segundo trimestre
- En el tercer trimestre
- Secreto del embarazo
- Sangrado durante el embarazo
- Contracciones de Braxton Hicks
- ¿Qué se siente al inicio del trabajo de parto?
- Cuándo contactar con tu matrona
¿Es normal el dolor abdominal en el embarazo?
El dolor abdominal puede ser común en el embarazo y, la mayoría de las veces, no es nada de lo que preocuparse.
Los dolores abdominales en el embarazo suelen estar causados por una de estas tres cosas:
- Estreñimiento
- Vientos atrapados
- Dolor en los ligamentos alrededor de la barriga (también conocidos como «dolores de crecimiento»)
Estos pueden experimentarse como dolores agudos o sordos, pero deberían aliviarse con un cambio de posición, después de defecar o expulsar gases, por ejemplo.
Algunas otras causas comunes de dolor abdominal en el embarazo que requieren un tratamiento médico simple (como los antibióticos) incluyen:
- Infecciones del tracto urinario (ITU)
- Enfermedad inflamatoria pélvica (EIP), normalmente causada por una infección de transmisión sexual (ITS)
Sin embargo, si experimenta alguno de los siguientes síntomas, es importante que se ponga en contacto con su unidad de maternidad, matrona o médico de cabecera para que la evalúen:
- Dolor intenso
- Calambres regulares
- Sangrado o flujo vaginal anormal
- Ardor al orinar (o inmediatamente después)
- Cualquier otro síntoma que le preocupe
Al principio del embarazo, los dolores abdominales más intensos, con o sin hemorragia, podrían indicar una amenaza de aborto o un aborto prematuro, o algo más grave, como un embarazo ectópico. En las últimas etapas del embarazo, estos síntomas podrían significar un parto prematuro, aunque esto es poco frecuente. Por lo tanto, es importante que busques el consejo de un profesional si tienes alguna duda.
Cómo aliviar el dolor abdominal durante el embarazo
Hay varias formas de aliviar el dolor abdominal durante el embarazo. Si las causas son el estreñimiento o el viento atrapado, puedes probar:
- Masaje abdominal
- Ejercicio ligero
- Beber tés digestivos, como el de menta
Estas soluciones pueden ofrecer un alivio relativamente rápido de los síntomas más leves. Sin embargo, las opciones de prevención y manejo a más largo plazo incluyen:
- Alimentarse con una dieta rica en fibra
- Comer despacio
- Evitar los alimentos que producen «gases»
- Beber mucha agua
- Hacer regularmente ejercicio suave
Si sientes dolor en los ligamentos, puedes aliviarlo con estiramientos regulares (el yoga para embarazadas es ideal para esto), cambios de posición y/o calor (por ejemplo, en un baño o aplicando una compresa caliente). Y aunque el descanso puede ayudar a aliviar el dolor, el ejercicio ligero regular también puede ser una buena herramienta para aliviar el dolor.
TIP: Vaciar la vejiga de forma regular y completa también puede ayudar a aliviar las molestias y, potencialmente, ayudar a evitar las infecciones urinarias.
Cuándo consultar por el dolor abdominal en el embarazo
Aunque el dolor abdominal en el embarazo no suele ser motivo de preocupación, si estás experimentando síntomas adicionales o el dolor es intenso, es el momento de contactar con tu profesional de la salud. Esto es lo que hay que tener en cuenta y lo que podría ser un signo de…
En el primer trimestre
Los calambres leves de tipo menstrual suelen ser comunes al principio del embarazo. Sin embargo, si no se alivian con el reposo, el calor y/o una simple analgesia, o si son intensos, podrían ser un signo de aborto espontáneo o de embarazo ectópico. Mientras que se estima que uno de cada cinco embarazos termina en un aborto espontáneo temprano, sólo uno de cada 90 es ectópico.
Los signos y síntomas a los que hay que prestar atención son:
- Sangrado o «manchado»
- Descarga vaginal anormal
- Mareos y/o desmayos
- Sentirse y/o parecer indispuesta sin una razón conocida
- Dolor en los hombros
- Dolor agudo y repentino o dolor sordo y prolongado en la zona inferior del abdomen/pélvica
En el segundo trimestre
Durante la mitad delembarazo, la mayoría de los dolores abdominales suelen estar relacionados con los ligamentos que se unen al útero, que se estiran a medida que éste crece y se acomoda.
Los abortos espontáneos tardíos son pérdidas de embarazo que se producen entre la semana 12 y la 24 de embarazo. Son poco frecuentes y sólo se producen en el uno o el dos por ciento de los embarazos.
Además, cualquier dolor (nuevo o que empeore) que no se alivie con simples medidas «caseras», o que vaya acompañado de una hemorragia vaginal, un flujo anormal y/u otros síntomas debe ser evaluado por una matrona o un médico.
Los abortos espontáneos tardíos a veces se presentan con un dolor similar al de las ITU, pero sin otros signos o síntomas urinarios. El dolor también puede comenzar en la parte baja de la espalda o extenderse a ella.
En el tercer trimestre
La mayoría de las veces, el dolor en el tercer trimestre es musculoesquelético (relacionado con los músculos, los huesos y las articulaciones). A medida que el bebé crece, son habituales los dolores debajo de las costillas (por el empuje del bebé contra ellas), alrededor de la pelvis y las caderas (por el reblandecimiento de las articulaciones) y en la parte baja de la espalda (por el tirón de tu creciente «bulto»).
Los «dolores de crecimiento», debidos al estiramiento de los ligamentos que sujetan el útero, y las molestias digestivas, como el estreñimiento, las flatulencias y el ardor de estómago, también son causas conocidas de dolor abdominal en el tercer trimestre. Las contracciones de Braxton-Hicks son muy comunes en el tercer trimestre y pueden causar molestias a algunas mujeres.
Al igual que con los dolores de las primeras etapas del embarazo, cualquier dolor intenso y/o repentino que se acompañe de sangrado u otros síntomas debe ser siempre revisado por un profesional.
Secreto del embarazo
El flujo vaginal en el embarazo se conoce como leucorrea y no sólo es un poco diferente al flujo que no se produce en el embarazo, sino que además aumenta a medida que éste llega a término. Suele tener un aspecto claro o «lechoso» y puede tener una consistencia fina o cremosa. Puede tener un olor distinto, pero no debería ser ofensivo.
Sus propósitos incluyen:
- Mantener un pH equilibrado
- Proteger al feto de infecciones lavando los patógenos no deseados
- Actuar como lubricante en el parto
La evaluación por parte de una comadrona o un médico se hace necesaria cuando el flujo vaginal del embarazo cambia de color, es verde o amarillo, tiene un aspecto y/u olor extraños, o se acompaña de dolor, picor o ardor.
Durante las dos últimas semanas del embarazo, el flujo vaginal puede contener una mucosidad de color rosa o marrón. Esto se denomina «show» y puede indicar que el parto está cerca.
Sangrado durante el embarazo
El sangrado ligero, o «manchado», al principio del embarazo puede ser común. Suele ser inofensivo y se debe a que el embrión se incrusta en la pared interna del útero, o a los cambios que se producen en el cuello del útero durante el embarazo, que lo hacen más propenso a sangrar.
En los embarazos en los que la placenta está baja o cubre la salida del cuello uterino (placenta previa), las hemorragias pueden ser frecuentes y deben ser vigiladas por el equipo de maternidad.
Algunas infecciones vaginales podrían causar alguna hemorragia, que puede verse como una pérdida «rosa» al mezclarse con los fluidos vaginales. Ocasionalmente, las infecciones de las vías urinarias pueden provocar hemorragias. Esta sangre provendría de la uretra (el orificio por el que sale la orina) y no de la vagina, pero es posible que no se dé cuenta de ello, ya que la sangre se ve en la ropa interior o en el inodoro.
En las primeras fases del parto, es normal que se produzca una «muestra» de sangre, que puede ser una pérdida mucosa rosada o manchada de sangre. Sin embargo, una pérdida de sangre roja fresca, sobre todo si es abundante, debe ser revisada por un profesional.
El sangrado en el embarazo, sobre todo cuando va acompañado de dolor y/o otros síntomas, debe ser evaluado por una matrona o un médico.
Contracciones de Braxton Hicks
Las contracciones de Braxton Hicks, o «apretones», se producen cuando el útero se contrae y se relaja, en preparación para el parto. Aunque algunos las denominan «falsos dolores de parto», pueden comenzar semanas o incluso meses antes de que se inicie el parto.
Las contracciones de Braxton Hicks suelen producirse durante el segundo o tercer trimestre del embarazo y, para la mayoría de las mujeres, son imperceptibles. Sin embargo, mientras que algunas mujeres pueden sentir una suave tensión en su «bulto» sin ningún tipo de dolor o molestia, otras pueden experimentarlas como si fueran calambres menstruales.
Se diferencian de las contracciones de parto en que suelen ser demasiado breves, irregulares y leves para ser consideradas contracciones de parto, y las mujeres las describen como más incómodas que dolorosas. Sin embargo, algunas contracciones de Braxton Hicks pueden variar en duración y fuerza.
Aunque se desconoce la causa exacta de las contracciones de Braxton Hicks, sí conocemos algunos de los factores desencadenantes. Estos pueden incluir:
- Niveles de actividad elevados
- Relaciones sexuales
- Deshidratación
- Tener la vejiga llena
Para aliviar cualquier molestia de las contracciones de Braxton Hicks, pruebe:
- Cambiar de posición
- Tomar un baño caliente
- Relajarse
Si esto no le ayuda, o le preocupa, póngase en contacto con su unidad de maternidad.
¿Qué se siente al inicio del trabajo de parto?
El trabajo de parto temprano, o la fase latente del trabajo de parto, es la primera etapa del trabajo de parto, cuando el cuerpo está haciendo un gran esfuerzo para conseguir que las contracciones tengan un patrón regular y el cuello uterino esté adelgazado, blando y en una posición más central.
Como cada mujer es única, la experiencia del trabajo de parto temprano será individual. Sin embargo, lo más común es que las mujeres experimenten:
- Al principio, dolores de tipo menstrual
- Contracciones irregulares que pueden detenerse y comenzar
- Dolor de espalda que puede venir en oleadas o ser persistente
- La «muestra» de moco puede aparecer por primera vez o volverse más copiosa y las aguas alrededor del bebé pueden romperse
Si experimenta alguno de estos síntomas con menos de 37 semanas de embarazo, es importante que llames a tu matrona o al hospital inmediatamente.
Cuándo contactar con tu matrona
Incluso si no tienes ninguno de los síntomas que acompañan a los descritos anteriormente, siempre es mejor consultar a tu matrona si alguna vez te sientes preocupada por cualquier aspecto de tu embarazo, aunque parezca una tontería.
Los centros de evaluación de la maternidad están abiertos las 24 horas del día y cuentan con matronas experimentadas que te ayudarán a tranquilizarte o te invitarán a que te evalúen, si es necesario. Están ahí para ayudarla y asegurarse de que tiene el mejor embarazo posible.
Última actualización: 08-09-2020