Los propósitos de esta investigación fueron (a) cuantificar los tiempos de sprint de intervalo entre el Home-Plate y la Foul-Line y la Foul-Line y la Primera Base, (b) determinar si existen diferencias en las velocidades de intervalo y la aceleración entre bateadores zurdos y diestros o entre agrupaciones de posiciones, y (c) cuantificar los determinantes del tiempo a la Primera Base en jugadores de Béisbol de Grandes Ligas durante juegos reales. Un total de 1.896 tiempos de sprint hacia la línea de falta (13,7 m) y la primera base (27,4 m) fueron registrados en 302 jugadores de béisbol por un solo entrenador, situado en el banquillo con un cronómetro de mano. Se calcularon las velocidades y aceleraciones de los intervalos entre el Home-Plate y la Foul-Line y la Foul-Line y la Primera Base; también se determinaron la velocidad y la aceleración medias a lo largo de los 27,4 m. La velocidad y la aceleración de los bateadores zurdos fueron mayores que las de los bateadores diestros desde el Home-Plate hasta la Foul-Line y desde el Home-Plate hasta la Primera Base; sin embargo, no hubo diferencias en la velocidad o la aceleración desde la Foul-Line hasta la Primera Base. La velocidad del intervalo fue significativamente mayor para los jardineros y los jugadores de campo en comparación con la de los receptores desde el Home-Plate a la Foul-Line y desde el Home-Plate a la Primera Base. Los jardineros fueron más rápidos que los receptores desde la línea de falta hasta la primera base; no hubo otras diferencias entre los grupos. Las aceleraciones desde el Home-Plate a la Foul-Line y desde el Home-Plate a la Primera Base fueron mayores para los jardineros en comparación con los jugadores de campo y los receptores. Los jugadores de campo aceleraron en mayor medida que los receptores entre estos intervalos. No hubo diferencias entre posiciones en la aceleración desde la línea de falta hasta la primera base. Estos datos indican que el tiempo hasta la primera base se ve más afectado por la aceleración desde el home hasta la línea de falta. Los entrenadores deberían implementar estrategias que animen a los jugadores a esprintar al máximo durante los primeros 13,7 m para maximizar las posibilidades de llegar a la primera base con éxito.