La ciencia detrás de este exfoliante mágico es realmente brillante…
A pesar del hecho de que suena como un elegante queso francés, el gommage es en realidad un enfoque brillante para exfoliar la piel, y en mi opinión es uno que no conoce suficiente gente. No sólo es sumamente eficaz para alisar, pulir y eliminar la piel muerta, sino que también es increíblemente suave y divertido de usar. ¿No te he convencido en las últimas 100 palabras? Vamos a sumergirnos y ver si podemos hacer que cambie de opinión.
¿Qué es el «gommage»?
Una vez más, no es un queso. Pero viene de la palabra francesa para «borrar». Sí, «borra» las células muertas de la piel, pero la verdadera razón detrás del nombre es porque el acto de usar un producto gommage es similar a borrar con un lápiz. (Más adelante hablaremos de ello.)
Piensa en el gommage como un exfoliante más amable y gentil que no está hecho de huesos de fruta abrasivos ni de microperlas que obstruyen el océano. Uno que no hará que tu esteticista te regañe por restregar en exceso, ni por adelgazar tu piel, ni por crear pequeños desgarros, ni por acelerar el proceso de envejecimiento.
¿Cómo funciona?
Lo que hace que el gommage sea tan suave es el hecho de que comienza como una crema, pasta o líquido, sin sólidos a la vista. Después de limpiar tu piel, aplicas el producto y lo dejas reposar durante unos segundos para que se seque. A continuación, se empieza a frotar.
Al igual que ocurre con las escamas de goma rosa al borrar algo, el acto de frotar los dedos contra la piel (y, a su vez, el producto) hace que el gommage se agarre y se desprenda, llevándose consigo un montón de células cutáneas muertas. Así es: se adhiere a las células muertas más externas de la piel y, como un rodillo de pelusa para la cara, las recoge y las hace rodar a través del gommage. No hay que salpicar agua por toda la piel cuando intentas quitarte una mascarilla que se ha quedado en la piel, no hay que estropear las toallas restregando las escamas de la línea del pelo, no hay que lavarse el pelo a pesar de que pensabas hacer el nudo de tres días porque no puedes quitar la mascarilla obstinada de la línea del pelo. No más!
La ciencia detrás del gommage es realmente brillante. Las fórmulas combinan la exfoliación química (¡gracias, enzimas!) con la mecánica (¡gracias, frotamiento de las manos contra la piel!). Como las enzimas disuelven las proteínas, se comen las células muertas que se encuentran en la superficie de la piel y luego se las llevan por el desagüe una vez que se ha frotado todo.
¿Todo eso que se desprende de la piel? Una combinación del producto y la piel muerta. Dado que otra parte de esa brillante fórmula hace que el producto se solidifique y se separe cuando se mezcla con el oxígeno y el aceite, la superficie rica en oxígeno y aceite de su cara hace que sea el lugar perfecto para que el gommage haga su trabajo, todo ello sin ningún tipo de cosquilleo, ardor o fregado con un paño para sacar los últimos trozos secos.
¿Cómo lo uso?
Aquí está la parte divertida. Como he dicho antes, sólo utiliza este producto sobre la piel limpia y sin maquillaje. Aplica una fina capa del producto en tu cara o cuerpo y déjalo actuar durante unos 10 segundos. A continuación, empieza a masajear suavemente tu piel hasta que empiecen a formarse esas bolitas y escamas blancas tan satisfactorias. No hay que preocuparse por frotar en exceso: lo peor que se puede hacer es entusiasmarse demasiado con el frotamiento y, entonces, todo habrá terminado antes de que te des cuenta. Sólo recuerda que debes seguir haciéndolo hasta que hayas eliminado todo el producto. Entonces, relájese y contemple su piel suave, lisa y rellena.
En serio, este producto es la gratificación instantánea de la piel en una botella. Es realmente sorprendente la diferencia que notarás inmediatamente en la textura y el brillo de tu piel, por no mencionar el lienzo de primera que acabas de crear para que cualquier otro producto realmente se hunda y penetre.
Si se me permite el atrevimiento, el gommage es tan (si no más) satisfactorio que exprimir tus puntos negros en un espejo de aumento. (¡No es que debas escarbarte la piel así! Aléjate de los espejos de aumento). Hay algo en el hecho de ver cómo la piel muerta se hace una bola y se desplaza, que resulta hipnotizante.
¿Listo para quedar impresionado? ¿Preparada para bajarte del tren de los exfoliantes duros y subirte al hermoso y suave tren del unicornio que es el gommage? El Mineral Face Peel de O.R.G. Skincare tiene mi voto. Fue el primer producto de gommage que probé en casa y es el que sigo utilizando. Este producto es vergonzosamente fácil de usar y como el tiempo de espera es literalmente de cinco segundos antes de empezar a frotar, los resultados son básicamente inmediatos. Las enzimas de la fruta hacen su trabajo de eliminación de la piel muerta como los profesionales que son, sin ningún efecto secundario o irritación. Y el aloe, el pepino, la jojoba, el regaliz y el cardo suavizan e iluminan la piel de una forma que te hará jurar que te has tragado la luz del sol y que ahora sale por tus poros. En serio. (También hacen una exfoliación corporal, si realmente quieres divertirte con la piel muerta.)
Y ya que tu piel está suave y radiante y todo esto sólo te llevó unos 20 segundos, puedes ir a disfrutar de un poco de queso francés. Au revoir.
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Imagen principal tomada por Jana Kirn.