De acuerdo, seamos realistas: Un herpes labial no es el tipo de cosa que quieres ver en tu pareja de Tinder, y mucho menos en tu propia cara. Pueden realmente joder tu autoestima, y parece que tardan una eternidad en curarse. Un poco como Britney alrededor de 2007, realmente – es tan malo, no puedes mirar hacia otro lado.
No te estreses – te tenemos. Conocimos este pequeño truco hace años, cuando la autora y fundadora de Go-To Skincare, Zoe Foster-Blake, nos lo susurró al oído un día. Funciona a las mil maravillas, lo juramos.
Así que aquí está: la cura para el herpes labial que ha evadido a la ciencia médica y a las #girlstriste durante décadas. Quitaesmalte de uñas. Sí, de verdad. Eso es todo.
Aquí está un paseo:
1. Sumerja un bastoncillo de algodón en quitaesmalte con 100% de acetona
2. Manténgalo sobre el herpes labial durante unos 10 minutos (escocerá mucho, pero hágalo, bebé llorón)
3. Deje que se seque
4. Llene una bolsa de plástico con hielo y manténgala sobre el herpes (coloque un pañuelo de papel entre la bolsa y su cara) durante 20 minutos
5. Repite cada pocas horas (hasta que veas resultados)
Usa tu sentido común aquí – si te irrita la piel, deja de hacerlo. Bebe mucha agua con una pajita y toma pastillas de lisina para ayudar en el proceso de curación desde dentro hacia fuera.
Muchas gracias, ZFB.
Si quieres leer aún más sobre el herpes labial, nuestros amigos de Health Ambition lo tienen claro.
Quita esa bolsa de papel, chica. Te ves bien.